LA INTENSIDAD DE LA VIDA

¿Habéis pensado en la intensidad de la vida?

yo sí pero solo a veces,

pienso en su intensidad inmensa,

en sus luces, en sus sombras,

en sus vistas, en sus amaneceres locos,

en el olor a café, a Mandarina,

a Alcanfor, a Jazmín,

a flor de Almendro,

a mueble viejo,

a Libro abierto, a colonia de peluquería,

 a Dama de noche, a tinta china...

pienso en que traje se va a poner,

de otoño y se adorna de hojas caducas y verde Musgo,

de invierno y se hace muñeco de nieve,

de primavera y florece de blanco celeste,

de verano y se tiñe de azul añil y con tonos amarillos...

pienso en sus miedos y temores,

en sus dudas, en sus escondites,

en sus huídas hacia atrás o hacia delante,

en sus innumerables vueltas,

en sus obsesiones y paranoias,

en sus maravillosas quimeras,

en sus alucinaciones estelares,

pienso en ello

y al final saco mis propias conclusiones,

la vida es una historia con un final que nadie conoce,

hablamos de muerte y pensamos que conocemos algo,

sabemos que nos visitará la muerte,

pero no conocemos ni el día, ni la hora, ni el año,

y menos sabemos porque causa se presentará la Muerte,

morir moriremos pero yo espero más tarde que antes.

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