He dejado mis penas aparcadas en la entrada de la casa

 

He dejado mis penas aparcadas en la entrada de mi casa.

Hay días en que uno entra en casa como si nada pasara 

o como si la vida se quedara en la calle

y tú mientras tanto y sin darte cuenta

te vas borrando del mapa

y te haces invisible e insípido

y te lo haces tanto

que te acabas convirtiendo en polvo infinito.

En fin,

que te difuminas en la nada,

o explicado de otra manera...

que el pez grande se come al chico

que el hombre se come al pez grande

y al hombre se lo comen los gusanos

y a los gusanos se los come la tierra

y así y siempre...

 volvemos al principio.


 




























No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR