INMORTAL

Hora digo que yo escribo por gusto, porque me divierte hacerlo, porque me lo paso pipa, porque disfruto con ello. Y dentro de unos años y si da la casualidad de que vendo algo y me hago algo famosillo, ¿que diré?, que escribo porque de algo tengo que vivir y el que quiera leerme que lo pagué y con creces. El precio de la fama, te hace ver las cosas de otra manera. Te hace ver que tú piensas que ya eres alguien y vas y te lo crees. Así de fácil y así de sencillo.

Ahora debía decir que no, que yo no soy de esos y que yo no vendo a la fama. Debía, pero no lo voy hacer y por la simple razón, de que coño voy a saber del como voy a ser mañana, y si seré un gilipollas engreído o seré la antorcha de los pobres. Hoy es fácil decir que no, pues no tengo nada que perder, aunque a veces tengo la tentación del pensar que de alguna forma se me compense por tantas horas que paso delante del teclado, pero de momento es un acto reflejo y que enseguida, se borra.

Y vuelvo a mi normalidad y porque vuelvo a pensar que para mi, el escribir, es la mejor forma que tengo de divertirme. Supongo que si llevara 20 años escribiendo y no sólo dos y teniendo que vivir de ello, pensaría de otra manera. Pensaría que yo tengo derechos de autor, que nadie me copie, que nadie se sirva de mis ideas y entonces, es cuando empezaría a pensar, que sería como un pequeño dios en la tierra, yo soy un tío con ideas y vosotros, los mortales, sois una panda de envidiosos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR