Ahora para escribir primero en mi
ordenador y después pasarlo ordenadamente al Blog, encontré un
método, que para eso dios me dotó de inteligencia y me puso la
cabeza encima del tronco y no lo describo, porque me da vergüenza
ajena. A veces más vale callarse y porque en ese momento piensas que
tienes una gran idea y cuando empiezas la descripción, te dices, tío
o eres tonto o así ya naciste. Aunque a veces las grandes ideas, son
más sencillas de lo que parecen y todo es cuestión de lanzarse.
Pero bueno, yo ya me lancé en cantidad
de cosas y ahora no voy a demostrar que soy un descerebrado de
mierda. Quietos y paraos, que uno tiene sus principios y su orgullo y
como decía el otro, yo moriré con las botas puestas. Ya me he
quitado de drogas, alcohol y de otros vicios y con eso llega y nadie
me va a quitar del vicio que me producen mis pensamientos. Sólo
faltaría eso. Si para preservar algún pensamiento tengo que saber
callarme, me callaré y optaré, por el silencio.
Las cosas claras y el chocolate espeso
y como en éste caso mi idea es bastante espesa, pues calladito
seguro que estoy más guapo. Como dicen en el mundo del fútbol, la
táctica para éste partido se queda en los entrenamientos y que
después los jugadores resumen muy bien: “intentaremos ganar éste
partido y lucharemos por ello”. Qué profundidad de pensamientos
nos ofrece el mundo del fútbol. Si Aristóteles a su lado se
quedaría corto.
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