
podría, pero creo que ya te lo he dicho,
te he dicho que eres un bicho,
te he dicho que tú lema es la cobardía,
y que tu escudo es una calavera vacía,
y que tú estas por encima,
por encima de mi y de lo que es humano,
por encima del mundo y de la estratosfera,
sí, tú eres el ángel vengador,
y te vengas de todo lo que se mueve,
te ries y te crees algo o alguien,
y desprecias lo que es puro y sincero,
lo odias, lo odias a muerte,
y si fuera por tí,
anularías y por decreto,
los sentimientos,
si y repito, anularías los sentimientos.
y todo porque tú te crees superior,
y eres la hostia y el puto amo,
sí, si eres lo que nunca pude soportar,
eres la maldad en carne y hueso,
y en el fondo sólo eres un payaso,
un payaso lleno de complejos,
un pobre payaso que tiene miedo,
un ganador ya vencido,
y un pobre paria perdido en su propio naufragio,
y ahora das pena y mucha pena,
y ay¡ penita mía,
pero lo que más pena me da,
es ver como ahora te arrastras por el suelo,
es que estás acabado como un espectro,
y caminas como un alma inerte y sin vida,
y sobre todo ver que ya estás ardiendo,
que ya ardes como la paja que se quema con el rastrojo.
Y ¡pobre aprendiz de brujo frustrado!
y mira, observa y siente,
como el viento te lleva,
y como te lleva hacia tú próximo destino,
y comprobarás,
ahora y siempre y hasta el fin de los tiempos,
como eres el mismo gusano, tanto vivo, como muerto.