Y hace un tiempo ya sin memoria
alguien me preguntó:
Y tú tío ¿de que vas?.
Y de vez en cuando esa pregunta ¿De que voy?
regurgita y rebota
entre las 4 paredes de mi duro cráneo.
Yo simplemente voy, le digo:
voy de cara,
voy sin tapujos,
voy de riesgos,
voy de quedarme sin nada o con todo
y para ir de eso,
no necesito maquillaje,
ni montarme falsos objetivos
ni hacer que hago lo que no hago.
Voy y punto.
Riesgos los tengo y los acepto,
y en la balanza de riesgos y ganancias,
ganan éstas últimas,
y porque me ahorro aguantar a muchos ladillas que se
disfrazan de personas.

No hay comentarios:
Publicar un comentario