muchas veces no sé lo que hago,
pienso que si cuando es no,
yo siento y pienso que la razón me acompaña
y cuando me doy cuenta no alcanzo a comprender
por el medio hay saltos siderales en otra dimensión,
hay espacios entre hojas y libros
y entre teclados y letras de imprenta,
yo me reconozco como buen recolector de sensaciones,
pero soy un ser carente de memoria,
la memoria que había en mi
se deslizó hacia las profundidades
y al parecer, se acabó depositando en el fondo marino,
y ahora funciono sin memoria o casi,
ahora me dices tu nombre
y puede que mañana te lo haya cambiado,
claro que a veces me dicen
pero ¿como puede que ser que no te acuerdes?
y yo le miro a la cara y le digo...
te juro que procuro acordarme de tu nombre
pero hay algo dentro de mi que me lo impide,
hay algo que me debe decir
¿para que coño quieres ocupar espacio cerebral con los nombres?
digo yo...que esa es una explicación posible
y la otra puede ser
que tenga carencia de ese gen de la memoria
y repito lo mío,
porque yo también tengo lo mío,
es el rico universo de las sensaciones,
no recuerdo datos, fechas, caras y rostros
pero si recuerdo cuando me acariciabas
y cuando nos matábamos a darnos besos.
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