TE BUSQUÉ (Poema)

Te busqué,
te juro que te busqué,
te busqué en las bosques de abetos,
y seguí tú rastro entre las hojas caducas,
y removí lápidas y tumbas,
y crucé a nado lagos y rios,
y  llegué tan lejos, tan lejos,
que ví como nevaba en los desierto del Sáhara.

Te busqué,
te juro que te busqué,
y escalé por precipicios y montañas,
y me sumergí por debajo de los hielos,
y  jamás me cansé de buscarte,
y eso que a veces dudé,
 y dudé de encontrarte,
pero la duda era mi estimulo y mi compañera,
era mi luz ciega,
y mi dama de la noche,
y yo te busqué entre zarzas y piedras,
entre helechos y cuevas,
y entre los límites prohibidos,
y jamás te encontré, ni te vi,
ni escuché un murmullo lejano,
ni una palabra suelta,
ni un grito de socorro,
y menos un te quiero
o un sin ti me muero,
nada, no escuché nada,
y tanto fue el silencio de tú boca,
que pensé que ya no estabas viva.

Pero te juro que te busqué,
y es verdad que te di por perdida,
me debilité y aflojé mis alarmas,
y ahora de repente apareces de nuevo,
tal cual viajera del tiempo,
y yo sé que vienes desde el otro lado,
del más allá y de donde reinan los muertos,
y eres un ánima, un espectro,
un alma resentida y vengativa,
y ahora eres tú la que me buscas,
pues aquí estoy, de pie y mirando al frente,
digno y orgulloso y muerto de miedo,
y sólo espero el momento definitivo,
y en que mi cuello lo corte tú guadaña,
muerte yo te espero,
te espero ahora y te esperaré siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

JULIO CORTÁZAR