No se trata de escondernos
bajo la piel del oso
y rugir al viento nuestro desconcierto.
Se trata de ser valientes y decididos.
Se trata de pasar página
y cambiar de libro.
Se trata de gritar con rabia
y hasta que la voz se quede enmudecida.
Se trata que al día siguiente,
yo o tú cambiemos de acera,
por si acaso quedó algún vestigio
o algún ascua encendida en la boca del estómago.
Se trata de hacernos invisibles,
de ser cuerpos de aire y viento
de ser almas cicatrizadas
y de ser la quinta esencia del amor,
es decir,
bajo la piel del oso
y rugir al viento nuestro desconcierto.
Se trata de ser valientes y decididos.
Se trata de pasar página
y cambiar de libro.
Se trata de gritar con rabia
y hasta que la voz se quede enmudecida.
Se trata que al día siguiente,
yo o tú cambiemos de acera,
por si acaso quedó algún vestigio
o algún ascua encendida en la boca del estómago.
Se trata de hacernos invisibles,
de ser cuerpos de aire y viento
de ser almas cicatrizadas
y de ser la quinta esencia del amor,
es decir,
saber que ahora
somos parte del desamor.

No hay comentarios:
Publicar un comentario