Pero al final eché la moneda al aire y salió, cara y cara significaba, Medicina. Y hasta el tercer año no me gustó Medicina, bueno también era lo lógico, pues hasta tercero no se entraba en la verdadera materia médica. Pero bueno, lo que yo quiero decir, es que hice Medicina igual que podía haber hecho Veterinaria o Química. Y tuve la posterior suerte, de que me gustó la materia médica y digo que es suerte, porque me pudo pasar lo contrario, que la repudiara. En el fondo, creo que todo puede llegar a gustarnos y estoy convencido de ello, de hecho pasa que con los años te das cuenta de que te gustan un buen montón de cosas y que si no las has hecho y realizado, ha sido por falta de tiempo o porque en aquél momento no te habías decidido a tirarte a esa piscina en concreto.
Ahora, desde la perspectiva que te da la vida, no me arrepiento para nada de que saliera, cara y soy médico y lo soy con mucho gusto. Claro que siempre me queda la duda, la duda de que si saliera cruz no estaría igual de contento o de jodido. Biólogo marino transoceánico y éste año al Ártico y a medir focas, aunque siendo más realista, me veo más midiendo las piezas de pescado en el Mercado de abastos del pueblo. En el fondo ya lo dije, da igual lo que hagas si estás contento. ¿Y como se puede estar contento previamente?, pues también estando previamente jodido y después y poco a poco, ya irás encontrando el equilibrio.

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