Pues dicen que en el fondo no cambiamos tanto y ese dicho tiene mucho de cierto, cambiamos algo pero el fondo de uno permanece casi inalterable y si uno era una persona buena (y valga la generalidad) seguirá siendo buena y aunque se vista de mala persona. Claro que esto permanece hasta que a uno no le aprietan demasiado fuerte los huevos y porque en la vida, como en todo, hay varios saltos cualitativos que todo dios tendrá que dar. Y si uno va consiguiendo capear los más fuertes temporales (o saltos cualitativos) puede ser que más o menos se conserve inalterable y tal como lo recordábamos de tiempos atrás...pero claro, previamente por esos pasos tenemos que pasar. Y son fáciles de suponer esos pasos: son el estudiar una carrera, son el ponerse a trabajar y de qué, son el que te casas o vives en pareja o en pecado mortal, son el que has tenido hijos, son todo ese conjunto de pruebas vitales que sí o sí, tienes que pasar (por lo menos lo ha sido en mi caso).
Y primer mensaje a todos los corredores que se pasan la vida corriendo y como si se les fuera el alma y su vida en cada intento por llegar a la siguiente meta: señores y señoras corredores, en la vida hay cosas más difíciles que el correr y hay más metas que llegar a la puta meta de culquier carrera y hay más sacrificios y más necesidades vitales que necesitan de un mayor esfuerzo y que además, te demostrarán de que material estás hecho y si a la primera de cambio, te vas a cambiar de acera o seguirás luchando. Por tanto, nada de sudorosos sacrificios y ardientes cuerpos enjutos y fibrosos...bueno sí, que los haya (en la vida tiene que haber de todo), pero que a los demás nos dejen en paz con su filosofía simplista y aburrida y que nada más habla del correr y de que corriendo aprenderás a sacrificarte y aser mejor persona.
Como decía aquel grillado corredor yanqui que se fue a México a correr con una tribu de allí que a su vez pasaba todo el día corriendo: "la vida es correr". Y entonces ya entremos de pleno en las verdades de fe o sea o te comes ese moco directamente y te lo crees a ciegas o si te lo pones a pensar dos veces, te das cuenta que al tío le pasaba algo dentro de su cerebro y o tenía un tumor ocupante de espacio o tenía un inmensa laguna llena de aire comprimido a punto de petar. Pues algunos que pululan a mi alrededor y que por supuesto se dedican a la monocultura del correr, no dicen esto en alto, pero lo piensan y claro, nos miran a los demás mortales (como tú y como yo), como seres endebles y pusilánimes y porque en el fondo están convencidos que todo el esfuerzo que ellos aplican por llegar a la siguiente meta se puede aplicar en la misma vida y que en resumidas cuentas, todo en la vida es a base de esfuerzo físico y cabezón, de pertinaz entrenamiento, de sudores profusos, de calambres musculares, de tiempos cronometrados, de buenas zapatillas para correr y de suplementos vitamínicos...Y bueno ¿y que les puede decir?...pues nada, que se busquen otras nuevas zapatillas, que sigan corriendo pero que por favor que bajen y que se digan y se sientan mortales o por lo menos que sepan que el correr no es su solucionador de problemas vitales, que para eso hay que analizar, pensar, sentir, amar, opinar, decidir y saber rectificar y que todo éste proceso no se lo salta nadie, ni el que corre se lo salta.
Como decía aquel grillado corredor yanqui que se fue a México a correr con una tribu de allí que a su vez pasaba todo el día corriendo: "la vida es correr". Y entonces ya entremos de pleno en las verdades de fe o sea o te comes ese moco directamente y te lo crees a ciegas o si te lo pones a pensar dos veces, te das cuenta que al tío le pasaba algo dentro de su cerebro y o tenía un tumor ocupante de espacio o tenía un inmensa laguna llena de aire comprimido a punto de petar. Pues algunos que pululan a mi alrededor y que por supuesto se dedican a la monocultura del correr, no dicen esto en alto, pero lo piensan y claro, nos miran a los demás mortales (como tú y como yo), como seres endebles y pusilánimes y porque en el fondo están convencidos que todo el esfuerzo que ellos aplican por llegar a la siguiente meta se puede aplicar en la misma vida y que en resumidas cuentas, todo en la vida es a base de esfuerzo físico y cabezón, de pertinaz entrenamiento, de sudores profusos, de calambres musculares, de tiempos cronometrados, de buenas zapatillas para correr y de suplementos vitamínicos...Y bueno ¿y que les puede decir?...pues nada, que se busquen otras nuevas zapatillas, que sigan corriendo pero que por favor que bajen y que se digan y se sientan mortales o por lo menos que sepan que el correr no es su solucionador de problemas vitales, que para eso hay que analizar, pensar, sentir, amar, opinar, decidir y saber rectificar y que todo éste proceso no se lo salta nadie, ni el que corre se lo salta.

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