Para que me den lecciones estoy yo,
no estoy para que me riñan,
ni para que me bronqueen,
ni para me suspendan y castiguen,
ni para que me prohiban y esto sí y esto no,
y que no salga de su boca ni una palabra amable
no quiero faltadas e insultos e improperios.
Como decirlo...
yo ya no estoy para estas cosas,
yo quiero amor y ser amado
quiero cariño
quiero esperanza
quiero compañía en mi último viaje
y que nadie me falte al respeto
y que nada me haga demasiado daño
y de vez en cuando
que me den algún beso
y un entrañable abrazo
y todo bien aderezado con un pizca de sal de vida.
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