llovían espigas de trigo y trozos de caramelo
y llovía tanto y tanto...
que me refugié bajo la sombra de un balcón,
hacía frío y estaba aterido
y mientras yo soñaba con la lluvia,
había otros que se dedicaron a joderme la vida
y fue tan grande su deseo,
que simplemente paró de llover,
se abrieron los cielos,
y se fueron las oscuras nubes...
y es que ayer soñé con la lluvia
y no sé muy bien el porqué...
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