LA VIDA Y SUS COSAS

                                     Cuando a mi me vendieron la película que se llama "Vida" me dijeron que iba a ser la hostia. Me dijeron que no me preocupara por los malos momentos y porque tarde o temprano vendrían los buenos...y es verdad, los buenos momentos acabaron llegando, pero no cayeron del cielo, ni resultaron ser gratis. Y ahí es donde reside su engaño, en que todo tiene un precio y un curre previo y nada sale gratis, ni te es concedido por la gracia del señor. Todos tenemos detrás una historia de sudor y de lágrimas y algunos más y otros menos y algunos te venden la moto y porque .no tienen nada detrás, ni lo tendrán. Cuando a mi me dijeron, tú disfruta de los buenos momentos y ama y quiere y sé feliz...creo que se olvidaron de mencionar que los buenos momentos son muy escasos, que el amor dura dos telediarios y que la felicidad es un bien excepcional, que muy pocos la podrán disfrutar y el que la disfruta será por instantes o en fogonazos. No hay un estado de felicidad perpetua, hay ratos, hay instantes, hay días y ya me cuesta decir, que hay meses y lo de que hay años, para que contaros...y yo hablo de generalidades y no de excepciones, porque ya veo a alguno diciéndome pues yo conozco un caso...y bueno y yo también ¡no te jode!.

                                        El estado de felicidad perpetua sólo existe en el que está perpetuamente flipado o fumado o drogado con drogas que le alteran su percepción de las cosas y su relación hacia ellas y bueno y para no olvidarme... hay personas que segregan sustancias que le producen ese determinado estado y son sustancias endógenas o sea que de por sí lo produce su Cerebro o lo que le queda de él...porque hay que estar bien jodido del coco para reconvertirlo todo en algo positivo y sea lo que sea y me das una bofetada y entonces, será por algo...porque me lo merezco...porque sin darme cuenta habré hecho algo malo y perverso y yo me pregunto y si fuera así, porque mejor no me das un beso y no una hostia, ¡coño, joder ya!...y porque yo sí que me reboto y si alguien osa tocarme un pelo sin mi consentimiento iba a decir, voy yo y le parto la cara, pero no, eso ahora ya no lo digo, pero tampoco le daría un beso y simplemente me iría.

                                        Ahora yo ya no busco pelea física, pues la violencia física la he dejado de lado y es más,  la veo (el dejar la violencia) como todo un símbolo de la mejor evolución humana...aunque tampoco cantemos victoria, pues hay mucho descerebrado a nuestro alrededor, que sigue pensando que la solución en ésta sociedad está basada en los palos, en las hostias, en las armas, en las bombas, en las guerras, en los símbolos, en las banderas y en la superioridad tan clasista y tan machista que intentan tener algunos sobre los demás.