NO TODO SON DESGRACIAS CATASTRÓFICAS

Pues hoy ya es Martes y día 11 de Noviembre y sigue avanzando el Otoño hacia sus profundidades. De tanto pedir que llueva, pues llueve pero no integramente o  sea no llueve todo el día, ni llueve a cubos, llueve suavecito y a poquitos. Ayer fue Lunes y estuve todo el santo día volando de Menorca a Mallorca y viceversa. O sea que ayer estuve entre las nubes borrascosas y divisando desde el aire los aconteceres de la vida moderna.

Y ayer me tocó un paciente de esos que pueden petar en cualquier momento, tenía un Aneurisma de Aorta a punto de explotar. Y el gran problema es que si eso pasa, no puedes hacer absolutamente nada y entonces tú función es solo rezar para que eso no pase y claro, el cruzar los dedos. Porque la Aorta es la Aorta y es nuestra principal cañería y salvo que seas un Mac Gyver de la vida y tal cual
le pongas un moco en su punto sangrante, eso explotará sin remedio.

Y claro, no hay nada más impotente que llevarte a un paciente al que no le puedas hacer nada y que toda tu función consiste en entreguarlo a Cirugía Vascular y si puede ser vivito y coleando. Después y ya en quirófano le pondrán un emplaste de cañería nueva y reluciente. Pero bueno, hubo otro paciente y este fue más tranquilo y además el que he mencionado, también llegó entero o sea que no todo son desgracias  catastróficas.